Magdalena Ortega es psicóloga laboral y CEO de Happy Space. Durante años trabajó en el área de recursos humanos en diversas empresas transnacionales y vio de cerca los importantes niveles de estrés que sufren los trabajadores.
“Para sentirnos bien en la vida y en nuestro ambiente de trabajo, hay pilares que están ligados al bienestar físico, económico, social o mental. Cuando tienes un problema impactando en estas áreas tu concentración en el trabajo se ve afectada”, explica Ortega a Las3Claves.
Esta problemática se acrecentó en todo el mundo durante la pandemia y también en nuestro país, pues en junio de 2020 en pleno confinamiento, el 51% de los trabajadores señaló que su salud mental se vio afectada desde que comenzaron a trabajar desde casa.
Para contribuir en este escenario, Happy Space utiliza machine learning para conocer las distintas necesidades de los trabajadores. Con un servicio que al ser contratado por las empresas, concede a todos sus colaboradores el acceso a una app que brinda diversos beneficios en materia de salud mental.
- ¿Qué es Happy Space?
- Happy Space es una plataforma que permite a las empresas hacer un seguimiento del pulso del bienestar organizacional en tiempo real y brinda a los trabajadores una solución que les permite tener apoyo emocional y recomendaciones de bienestar a través de un asistente virtual.
Dentro de la plataforma tenemos un espacio donde distintos profesionales del bienestar (psicólogos e instructores) ponen a disposición actividades que los trabajadores pueden hacer por sí mismos y tienen la posibilidad de contactarlos para acceder a distintas terapias y soluciones que mejoran su bienestar en el día a día.
También pueden ver sus videos o hacerles preguntas sobre temas vinculados a sus terapias si es que es un psicólogo, o ver sus clases si es un profesor de yoga. A medida que más interactúan más se personaliza y más acceso tienen a otros beneficios de la plataforma.
- ¿De dónde viene la idea?
- Estuve cerca de 10 años trabajando en empresas multinacionales en las que se veían altos niveles de estrés. Lideraba equipos de recursos humanos y veía que muchas personas en ocasiones no tienen las herramientas para afrontar el estrés en el día a día y eso termina por enfermarlos.
Hoy en día, por ejemplo, imagínate lo que están viviendo las familias con hijos y que tienen que manejar todo lo que implica una casa además del trabajo. Las jornadas son interminables y quizás no tienen los espacios adecuados para trabajar en casa. Esos son factores estresantes para los teletrabajadores.
Además, llegó un momento en mi historia laboral en que decidí renunciar y me fui a la India a profundizar en el yoga y la meditación. Yo sentía que había muchas herramientas disponibles para enfrentar el estrés y la ansiedad, pero a pesar de que están ahí no todo el mundo las puede ver.
- ¿Cuál es el rol de la tecnología?
- Siempre que llegamos a una empresa hacemos campañas de activación y generamos una comunidad en la plataforma que ellos utilizan, como Teams o Slack, por ejemplo. Ahí ellos van recibiendo actualizaciones de la plataforma hasta que se registran y pueden ir diciéndole al asistente virtual los temas que más le interesan. Este les da recomendaciones, les envía contenido de forma constante y pueden acceder a un feed de actividades.
Utilizamos los datos para personalizar la experiencia de los colaboradores dentro de la plataforma y para que nuestro asistente virtual pueda ir mejorando las recomendaciones que entrega a los usuarios a través de sistemas en base a clusters de interés. Esto nos permite ir aprendiendo cuál es el nivel de impacto de las distintas actividades y acciones que los usuarios llevan a cabo dentro de la plataforma para poder recomendar cosas a otros usuarios y buscar estos match entre profesionales o actividades.
En el caso de las empresas nuestro foco es poder generar ciertas recomendaciones en base a tendencias o datos que nosotros vemos de los usuarios de las distintas áreas, para que se puedan tomar acciones de bienestar en base a inteligencia de datos. Lo hacemos con modelos que van aprendiendo de los usuarios.
Uno de los grandes dolores en recursos humanos es la falta de data. No existe suficiente información como para tomar decisiones basadas en datos, las acciones tienden a ser más intuitivas o de lo que creen que les puede servir a las personas. No hay una base más dura que permita tomar decisiones que impacten en ciertos indicadores.
- Apostar por lo remoto, ¿estaba pensado desde antes de la pandemia?
- Nosotros teníamos un producto de mindfulness en módulos de realidad virtual que instalábamos dentro de las empresas, pero llegó la pandemia y nadie iba a trabajar ni podría ponerse los lentes porque podía ser un foco de contagio.
En ese momento nos vimos obligados a hacer un giro que nos permitiera llegar a las personas, pero estando ellos en sus casas. Así empezamos a pensar en cómo personalizar el bienestar para salir de los grupos pequeños y poder impactar en más personas. Diría que fue gracias a la pandemia que pudimos inventar una solución para llegar desde las empresas a las casas.
- ¿Cómo adoptaron esta herramienta los trabajadores?
- Ha sido bien recibida desde el punto de vista de la interacción y de las recomendaciones, para ellos es como una vía de escape en el día a día. Les permite relajarse y acceder de forma fácil a actividades o que les lleguen recordatorios que digan: “es momento de tener una pausa” o “tenemos esta actividad para ti”.
Además, en la situación actual en que no ves a tus colaboradores y no tienes esas conversaciones de pasillos, poder monitorear el bienestar de los trabajadores se ha vuelto una necesidad súper importante para los equipos de recursos humanos. Muchos de ellos están abordando esto con encuestas y esas cosas, pero nuestra solución es cercana a los usuarios porque interactúa con ellos en el día a día.
Las3Claves de la salud mental en el entorno empresarial:
1- La medición y el monitoreo constante del bienestar de parte de las empresas de sus equipos y personas. En la medida que llevas el seguimiento de ciertos hábitos, puedes ver cómo se comportan en el tiempo y cómo están viviendo en torno a sus hábitos.
2- Entender que el bienestar no es igual para cada trabajador dentro de las empresas. Las necesidades de unos y otros no son iguales, por eso la personalización del bienestar cubre las necesidades de los distintos intereses de los trabajadores y permite co-construir una cultura organizacional saludable.
3- Las decisiones no tienen por qué ser tomadas en base a la intuición porque existen datos y ejes estratégicos. El bienestar requiere dejar de ser un extra o un adorno en la gestión de recursos humanos. El día de una persona en el trabajo impacta en su productividad y se requiere una base sólida para generar inteligencia en el funcionamiento del bienestar. Con esto las empresas pueden tomar acciones preventivas que impacten en ejes estratégicos como el ausentismo, la rotación y la retención de talentos, por ejemplo.